domingo, 28 de febrero de 2010

MADRE TERESA Y LOS ANGELES

En un viaje accidentado de Ávila a Salamanca se le hizo noche cerrada, y unos ángeles aparecieron con antorchas abriéndoles camino.

La leyenda se formó sobre un relato que hizo la compañera de viaje Doña Quiteria Dávila, que dice así:
"Caminando con una noche muy áspera, oscura y tenebrosa, junto a un arroyo que se había de pasar, y yendo con mucho miedo esta declarante y esforzándola la M. Teresa que no le tuviese, vio un resplandor delante de ella, como causado de hacha que viniese de detrás, que siempre las fue alumbrando hasta entrarlas en la población".(1)

En la primera Vida Gráfica, publicada en Flandes en el año 1610, aparecen unos ángeles con antorchas precediendo a las andariegas.

(1) Tiempo y vida, II, 334
La Herencia Teresiana
Fr. Efrén J. M. Montalva

jueves, 25 de febrero de 2010

ENTRE PUCHEROS ANDA EL SEÑOR

Algunas veces se extasiaba con la sartén en la mano, "que también entre pucheros anda el Señor"

Al comienzo de sus fundaciones ordenó la Santa que se hiciese la cocina por semanas y cuando le tocaba a ella ponía un esmero singular y ponía en evidencia su ternura maternal con las hermanas. Su compañera de semana, Isabel de Sto. Domingo, la vio alguna vez arrobada con la sartén en la mano, y dábase el caso que no quedaba en la casa más aceite que el que había en la sartén, y asiéndose de la misma sartén para que no se derramase, se sentía contagiada por el arrobo de la Madre y con riesgo de quedas ambas extasiadas asidas de la sartén. (1)


Dice Ribera que "de noche estaba pensando cómo guisaría los huevos y el pescado y cómo haría el caldo que fuese diferente de lo ordinario, para dar algún regalo a aquellas siervas de Dios, y aquella semana era la casa bien proveída" (2) . Quedó memoria en San José de Ávila que cierto día, no de su semana, preguntó la Madre a la semanera:  ¿Qué tienen para cenar mis monjas? Respondió la otra: Madre, tengo rábanos y leche.  Exclamó la Santa:  ¡Dios sea conmigo! ¡Rábanos y leche! tráigame unos huevos, y con esa leche y pan rallado haremos un manjarcillo, y con eso cenaremos.  Hasta hoy se guarda este guiso, en memoria de la Madre que no quiso matar a sus monjas con rábanos y leche.

(1) Isabel de Sto. Domingo, Proc. Ávila 1610, a. 64
(2)F. Ribera, La vida de la M. Teresa, 1. 4, c.16

La Herencia Teresiana - Fr. Efrén J.M. Montalva

La imagen corresponde a la cocina primitiva del Convento de San José de Ávila, cocina de Teresa.


sábado, 20 de febrero de 2010

ANÉCDOTAS Y LEYENDAS



Cuando la Madre Teresa de Jesús fue nombrada priora de la Encarnación contra el parecer de las monjas, puso en la silla prioral, para aquietarlas, a la Virgen de priora, y por suprior a San José.

Era fama que el santo Patriarca "le parlaba cuanto las religiosas hacían, y así le nombraba El parlero.  

En testimonio de esta verdad se quedó con la boca abierta milagrosamente.


Cuéntase en el convento de Toledo que cuando se despedía de ellas la Madre Teresa, para no verlas ya más, lloraban todas.

Y una imagen del Niño Jesús formó también parte en el lloro e hizo algunos pucheritos de pena.

Y desde entonces las monjas lo llaman El lloroncito.





 Arriba: Imagen de San José, El parlero
 Abajo: Imagen del Niño Jesús, El Lloroncito, convento de Carmelitas Descalzas de Toledo.

La herencia Teresiana
fr. Efrén J.M. Montalva

miércoles, 17 de febrero de 2010

PÁGINAS EN BLANCO


Páginas en blanco del Libro de Las Moradas, aparecían de pronto escritas sin saber cómo.

Hay varias testigos que la vieron escribir vertiginosamente; pero no sé por qué llegaron a verla, unas escribiendo a oscuras sin más luz que la que irradiaba de la cabeza, y otras, que estando el papel en blanco aparecía de pronto lleno. He aquí algunos relatos: Dijo Ana de la Encarnación: "Una noche, escribiendo el libro de Las Moradas en el convento de Segovia, vi, desde la puerta de su celda, adonde estaba esperando si quería algo, que tenía el rostro con una luz muy clara y de ella salían unos resplandores como rayos dorados... hasta las doce de la noche, que dejó de escribir; al punto que dejó el cuaderno, se le quitó el resplandor. Y cuando escribía iba tan de priesa y sin detenerse a borrar ni enmendar que bien parecía ser cosa milagrosa".

Refiérese de la M. María del Nacimiento que "entrando una noche a darle un recado, vido como comenzando a escribir un cuaderno que estaba en blanco, acertó a llegar a las primeras letras que escribía en él , y quitándose los anteojos para oir el recado, antes de abajar las manos se quedó arrobada en aquella postura que le cogió el recado y estuvo algunas horas en aquel arrobamiento, y que la dicha M. María del Nacimiento estuvo presente sin apartarse un punto de mirarla, asombrada de ver tan gran arrobamiento. Y a cabo del él, cuando volvió en sí, vido que el papel que antes estaba en blanco le tenía escrito de su misma letra; y como la Santa vido que la dicha Ma. del Nacimiento la había visto, por que no echase de ver lo escrito, al descuido arrojó en una arquilla el dicho cuaderno". 

El testimonio es indirecto, de Ana de los Ángeles, y en su imaginación acrecentó la nota que con más sencillez expuso la propia Ma. del Nacimiento con estas palabras: "De la manera que esta testigo vio que escribía era con gran velocidad y con tan gran hermosura en el rostro, que a esta testigo la admiraba; y estaba tan embebida, que aunque allí junto se hiciese algún ruido no la estorbaba",
He aquí como nacían las leyendas.

Introducción a Las Moradas (Obras Completas) II
Fr. Efrén de la Madre de Dios, ocd

viernes, 12 de febrero de 2010

CON UNA BLANCA Y CON DIOS

Le preguntaron a la Santa cómo le era posible, tan sola, fundar tantos conventos, y dicen que respondió:
-Teresa de Jesús y una blanca, no vale nada; Teresa de Jesús con una blanca y con Dios, lo puede todo. (1)

El dicho ha tenido varias versiones; en el fondo era una idea madre de que en la obra de las fundaciones había sido manifiesta la ayuda de Dios.  "Solía ser lenguaje ordinario suyo, dice una testigo, que para cualquier fundación de monasterio no le era necesario más que una campanilla y una casa alquilada; porque cuanto más pobre era la fundación, sentía en su alma y mostraba en su semblante regocijo." (2)  En cierta ocasión, dudando entre la pobre fundación de Villanueva de la Jara y otra que le ofrecían en Arenas con seiscientos ducados, entendió de Cristo: "Teresa, con pobres pescadores fundé Yo mi Iglesia." (3)
Decía Julián de Ávila : "Ningún hombre de los que en el mundo son ricos pudo tener tanta confianza en su dinero que tiene consigo, como ella tenía en su Dios, sin llevar blanca ni tenerla de renta. (4)

(1) - Otilio, I.c.4
(2) - Isabel de Sto. Domigo, Proc. Ávila 1610, a. 53
(3) - Ana de San Agustín, Proc. Villanueva de la Jara, 1596 (BMC 18, 512)
(4) - Julián de Ávila, Proc. Ávila 1595 (BMC, 18, 203)  

martes, 9 de febrero de 2010

"YO SOY JESUS DE TERESA"

Cuéntase que una vez bajaba las escaleras del convento de la Encarnación y topó con un niño. Preguntó: -¿cómo te llamas niño hermoso?- Y el niño a su vez contestó: -¿Y tú, cómo te llamas? -
- Yo soy Teresa de Jesús - dijo ella. Y él - Pues yo soy Jesús de Teresa. 

Desde luego la Santa nunca tuvo visiones corporales, como para creer que el niño de la escalera fuese el niño Jesús, sin que su alma hubiese saltado de gozo con sólo presentirlo.  Ella también asegura que "jamás vio cosa con los ojos corporales ni la oyó", que "nunca con los ojos del cuerpo vio nada, sino con una delicadez y cosa tan intelectual, que algunas veces pensaba a los principios que se le había antojado"(1)
Es cierto, sin embargo, que tenía visiones y hubo testigo de ellas, como esta que refiere Ana de San Agustín: "Viniendo en procesión (del traslado del Santísimo en Villanueva de la Jara) vió cómo entre medias del Santísimo Sacramento y de la dicha M. Teresa de Jesús, que venía detrás, iba un Niño hablando a la dicha M. Teresa de Jesús, que parecía a un Niño Jesús que el prior del convento de La Roda les había dado.  Y que preguntándole esta testigo lo que había visto, le dijo:  "Hija, yo os mando en virtud de santa obediencia no lo digáis a nadie." (2)
También refiere otra testigo que habiendo concluído cierta fundación, había oído una voz que le decía: "Hija Teresa" Y respondiendo la M. Teresa: "Señor mío", le mostraron una cestica de flores de diversos colores, diciéndole: "Mira que flores he cogido del jardín que me has plantado" (3)

(1) - Cuentas de conciencia, 53,2 y 21
(2) - Ana de San Agustín, Proces. Villanueva de la Jara, 1596, a.6
(3) - Constanza de la Cruz,   "                "                  " , 1596, a.6

La Herencia Teresiana
Fr.Efrén J.M. Montalva

¡¡ CARMELITAS DESCALZOS !!!



Tomado de encaminoocd. (You Tube)

sábado, 6 de febrero de 2010

SI NO HUBIERA CIELO...

Cierto día, en uno de sus coloquios con Dios, éste le dijo: "Teresa, si no hubiera criado los cielos, por tí sola los criara" (1)

Esta leyenda tiene en lo que cabe, mucho de historia, a juzgar por el siguiente testimonio de la sobrina, Teresita, sobre unas notas íntimas que ella curioseó: "Halló entre otras cosas escritas de su letra esta cifra: Octava de San Martín, treinta y tres: yo por ti e tú por mí. No decía más: pero a lo que se ha podido entender, fueron estas palabras dichas de Cristo Nuestro Señor en la oración, mostrándola la activa unión que tenía ya con su alma... Y ha sentido que así fueron las otras palabras que el Señor dijo a la misma Santa Madre otra vez: Mi honra es ya tuya y la tuya mía. Otra vez le dijo:  Si no hubiera criado los cielos, por tí los criara;  con otras palabras de tan excesivo amor, que por ser de tanto favor no quiso la Santa Madre escribirlas en parte que se pudiesen saber fácilmente, sino que debajo de sello a un confesor suyo dominico, llamado fray García de Toledo, a quien se dieron unos papeles suyos sellados después de su muerte, sin que jamás se supiese en este convento qué se hicieron."(2)

(1) Otilio I, c, 21
(2) Teresa de Jesús, Proces. Ávila 1610, a. 78

La Herencia Teresiana
Efrén J. M. Montalva, ocd

jueves, 4 de febrero de 2010

LA MUJER QUE SE ENTENDIA CON DIOS

El mayor impacto que dejó Santa Teresa a los testigosde su vida fue de mujer poderosa ante Dios, que mereció su amistad y trataba con Él como una esposa habla con su esposo, como se habla a un amigo incondicional.

En Ávila alcanzó el glorioso renombre de Teresa de Jesús la Omnipotente.

No es que lo fuera; pero así pareció. Tenía buen fundamento.  En una cuenta de conciencia de Beas, de 1575, escribió: "Estando en el convento de Veas, me dijo nuestro Señor que, pues, era su esposa, que le pidiese, que me prometía que todo me lo concedería cuanto le pidiese. Y por señas me dio un anillo hermoso, con una piedra a modo de amatista" (CC 28)

El obispo de Ávila, D. Alvaro de Mendoza, solía decir con admiración rayana en pavor: -"Voto a mi vida, que yo no entiendo a la Madre; más créola, porque siempre se efectúa lo que comienza."-  Y así en lo que parecía imposible nos preguntaba el obispo si la habíamos oído decir que se haría, y endiciéndole que sí, decía: -"Pues yo lo doy por hecho."- (1)

(1) ANA DE JESUS, Proces. Salamanca 1597, a 4

La herencia teresiana
Fr. Efrén J.M. Montalva

lunes, 1 de febrero de 2010

AVISOS DESDE EL CIELO


Se hicieron célebres unos avisos que dio la Santa desde el cielo a la M. Catalina de Jesús, la fundadora de Beas, que se publicaron en las crónicas:
  1. Ama más y ama con más rectitud, que el camino es estrecho.
  2. Los del cielo y los de la tierra somos una misma cosa en pureza y amor. Los de acá, gozando; los de allá, padeciendo; nosotros adorando la esencia divina, vosotros al Smo. Sacramento.
  3. Lo que los religiosos han menester es caridad unos con otros, llaneza y desasimiento de seglares.
  4. El demonio es tan soberbio que pretende entrar por las puertas por donde entra Dios, que son las comuniones y las confesiones y oración, y poner ponzoña en lo que es medicina.
  5. Ninguno repruebe el modo de proceder que otro lleva.
  6. Nunca el que gobierna se crea de ligero sin examinarlo muy bien, primero que se mueva a nada.
  7. Cualquiera cosa grave que se haya de determinar, pase primero por la oración.
  8. Nunca cosa espiritual o temporal se procure por los medios que los seglares tratan sus negocios; porque la solicitud temporal causa tinieblas en el espíritu.
  9. Guarde quien gobierna mucha obediencia a su superior, que de esta manera se quitan muchas inquietudes y los súbditos se enseñan a obedecer.
  10. Procúrense crias las almas desasidas de todo lo criado, interior y exteriormente, pues se crían para esposas de un Rey tan celoso, que quiero que aún de sí mismas se olviden.
  11. Siempre se alabe y siga la penitencia, y repréndase cualquier abuso y exceso de regalo; porque a la verdad, como no dañe la salud, cualquier penitencia y mortificación es provechosa al espíritu.
  12. El libro en que más conviene leer es la Cartilla (o Catecismo), meditando día y noche la ley del Señor.
  13. Procuren ser los religiosos muy amigos de pobreza y alegría, que mientras durare esto durará el espíritu que llevan.
  14. Repártanse las virtudes entre todos; porque Dios las dará a quien se dispusiere a ellas.
  15. Purifíquense las almas, que Dios quiere hacer su morada en almas puras.
Francisco de Santa María
Reforma de Descalzos, 1,5. c.53