lunes, 19 de julio de 2010

20 DE JULIO - DIA DEL AMIGO


ORACIÓN

¡Oh bondad infinita de mi Dios,
que me parece os veo y me veo de esta suerte!
¡Oh regalo de los ángeles,
que toda me querría, cuando esto veo,
deshacer en amaros!

¡Cuán cierto es sufrir Vos
a quien os sufre que estéis con él!
¡Oh, qué buen amigo hacéis, Señor mío!
¡Cómo le vais regalando y sufriendo,
y esperáis a que se haga a vuestra condición
y tan de mientras le sufrís Vos la suya!

¡Tomáis en cuenta, mi Señor,
los ratos que os quiere,
 y con un punto de arrepentimiento
olvidáis lo que os ha ofendido!

He visto esto claro por mí, y no veo, Criador mío,
por qué todo el mundo no se procure llegar a Vos
por esta particular amistad…

Sí, que no matáis a nadie ­¡vida de todas las vidas!­
de los que se fían de Vos
y de los que os quieren por amigo;
sino sustentáis la vida del cuerpo
con más salud y dáisla al alma.


"... que no es otra cosa oración mental, a mi parecer, sino tratar de amistad, estando muchas veces tratando a solas con quien sabemos nos ama".  Teresa de Jesús

(Esquemas del Libro de la Vida, ed. de Tomás Álvarez. Monte Carmelo Burgos 2004)

domingo, 18 de julio de 2010

NUESTRA SEÑORA DEL MONTE CARMELO: EL JARDÍN DE LAS GRACIAS DE DIOS.

« Carmelo » es una palabra hebrea. Se creía que venía de« Kerem », que significa jardín, viña, y de « el » que quiere decir Dios, de manera que « Carmelo » querría decir « el jardín de Dios ». Pero, « Kerem » es un nombre común aplicado « por antonomasia », a esa montaña, precisamente por su fertilidad y la exhuberancia de su vegetación. 


Esas características hicieron así de ella « el jardín » por excelencia de Palestina. Si unimos a este hecho toda una serie de pasajes del Antiguo Testamento, donde se habla del Carmelo, nos percatamos que esta montaña, en la literatura, profética y poética de Israel, devino muy pronto el símbolo de la gracia: el Carmelo es el jardín de la belleza y de la fecundidad, de la gracia y bendiciones de Dios para su pueblo.
Lo que se dice de Tierra Santa en general, "tierra donde fluyen leche y miel" es dicho de manera privilegiada de esta parte de Tierra Santa que es el Monte Carmelo.

Este aparece así como el corazón de la Tierra prometida, como lo más hermoso que existe en ella. Él es el símbolo de la gracia de Dios, bien común de toda la Tierra prometida.

Y todo lo que sucede en la Antigua Alianza sería la imagen, el "modelo" de lo que se cumplirá en la Nueva Alianza, el nombre del Carmelo conservará en ésta la significación simbólica que tenía en la otra. Él representará siempre el jardín de las gracias de Dios.


José de Santa María, OCD
La Virgen del Monte Carmelo,
P. Lethielleux 1985


jueves, 15 de julio de 2010

16 de Julio - SOLEMNE CONMEMORACIÓN DE LA BIENAVENTURADA VIRGEN MARÍA DEL MONTE CARMELO


Himno de las I vísperas

Blanca flor del Carmelo,
vid en racimo,
celeste claridad,
puro prodigio
al ser, a una,
Madre de Dios y Virgen:
¡Virgen fecunda!

Madre, que florecida 
del Enmanuel,
atesoras intacta
la doncellez; 
estrella, guía
de los rumbos del mar, 
senos propicia.

Vástago de Jesé,
vara profética
que el Hijo del Altísimo
das en cosecha;
Madre, consiente
que vivamos contigo ahora y siempre.

Azucena que brotas
inmaculada
y te yergues señera
entre las zarzas; 
devuelve, Virgen,
nuestra frágil arcilla
a su alto origen.

Ponnos, nueva Judith,
para la lucha
tu santo Escapulario
como armadura;
con tu vestido
cantaremos victoria
del enemigo.

Bajo noches oscuras
navega el alma,
enciende tú los rayos
de la esperanza,
y sé el lucero
que lleve nuestra nave
segura al puerto.

Señora, desde siempre
los carmelitas
nos tenemos por hijos
de tu familia,
y confiamos 
que un día nos acojas
en tu regazo.

María, puerta y llave
del paraíso,
queremos desatarnos
y estar con Cristo;
si tú nos abres,
reinaremos allí
con tu Hijo, ¡Madre! Amén

domingo, 11 de julio de 2010

AFICIÓN AL CAMPO

Dícese, según una leyenda divulgada por René Bazín, que la Santa Madre Teresa expresó cuánto importa gozar del paisaje así: " No importa no tener sino media sardina si tenemos delante un hermoso panorama".(1)


Era notoria su afición al campo. Dice: "Aprovechábame a mí también ver campo u agua, flores. En estas cosas hallaba yo memoria del Criador, digo que me despertaban y recogían y servían de libro" (2)
Sus compañeros de camino dan fe de la propensión que tenía a embeberse en el paisaje, olvidándose de todo.  Así en el viaje a Sevilla, salida de Beas, dice María de San José:  "Aquel primer día llegamos a la siesta
en una hermosa floresta, de donde apenas podíamos sacar a nuestra santa Madre; porque con la diversidad de flores y canto de mil pajarillos, toda se deshacía en alabanzas de Dios" (3)


(1) Otilio, I. c.13
(2) Vida, 9,5
(3) Libro de Recreaciones, 9. Tiempo y Vida II, 394

sábado, 3 de julio de 2010

CAMINO



No son tiempos de creer a todos, sino a los que viereis van conforme a la vida de Cristo. Procurad tener limpia la conciencia y humildad, menosprecio de todas las cosas del mundo y creer firmemente lo que tiene la Madre Santa Iglesia y a buen seguro que vais buen camino. 



Teresa de Jesús, (C. 21,10)